martes, 18 de octubre de 2011

Primera vez

Su respiración era errante y agitada, tenía la garganta seca y sentía que el fuerte golpeteo de su corazón de un momento a otro le rompería las costillas para salir disparado de su pecho.
El constante y suave vaivén en vez de calmarla la inquietaba aún más, sus manos sudaban y acompañado de la gran humedad del ambiente y el agua salada que cubría su rostro y parte de su cabellera hacían temblar ante el suave contacto frío con el aire. Le daba la idea que en cualquier momento se desmayaría.

Un fuerte abrazo desde su espalda la sacó de su transe.

 -Tranquila, si quieres no lo hacemos, dijo el dueño de ese abrazo mientras comenzaba a forcejear con el pesado cinturón de la muchacha.

-No, estoy bien.

Luego de un “click” generado desde el cinturón, él la tomó por los hombros y la giró para mirarle el rostro.

- No entiendo por que estás tan nerviosa…dijo el hombre mientras la ayudaba a sentarse en una esquina y tomaba una de sus piernas colocándola sobre su regazo para luchar ahora con el botín.

-Es que es mi primera vez…dijo ella con voz trémula….

El soltó una suave carcajada

-Los dos sabemos que eso es mentira, lo hacemos al menos una vez a la semana.  dijo mientras comenzaba a pelear con el otro botín de la muchacha y con una ligera sonrisa en los labios.

-Si se, pero nunca lo he hecho con ellos.

-No dejaré que te hagan daño, solo no hagas movimientos bruscos y no te acerques…deja que ellos lo hagan.

Ella solo asintió con la cabeza.

-¡Listo!  Ahora ponte el chaleco - dijo el hombre colocando el pesado chaleco tras su espalda para que ella colocara sus brazos por las correas – trata de calmarte, que si no te quedarás sin aire en menos de diez minutos.- dijo con tono irónico mientras le apretaba fuertemente los seguros de las correas.

-Ella rodó los ojos- no creo, llevo 14 litros comprimidos en este mastodonte- movió sus brazo hacia su espalda para golpear la botella.-

-Si te quedas sin aire, avisa que te ayudo con mucho gusto- dijo él moviendo sus cejas hacia arriba y abajo rápidamente.

- En tus sueños querido- dijo ella colocándose la mascarilla-

Ella cerró los ojos para calmar su respiración, se colocó en regulador en la boca, y mientras una de sus manos sujetaba el cinturón, la otra sostenía la máscara y el regulador hacia su rostro. El hombre miró sobre el hombro de la mujer- ¡DESPEJADO!- gritó. Ante esa señal ella se lanzó hacia atrás para caer en las frías aguas.

A pesar del grueso traje que llevaba puesto, sintió como cada célula de su piel hacía contando con el frío liquido, ahora el vaivén era más fuerte ya que estaba en medio de las olas, por lo que se sujetó de una de las correas del bote. Luego de unos minutos escuchó un “splash” desde el otro lado indicando que su compañero ya había abandonado la nave.

Se acercó a él para escuchar nuevamente sus indicaciones.

-Bajaremos por del cabo[1] de manera lenta….recuerda que llegaremos sólo a los veinte metros, sígueme siempre, si aparecen te quedas quieta y no hagas movimientos bruscos, si me pierdes de vista, espera treinta segundos y subes de manera lenta-

- Ella no pudo evitar rodar los ojos- lo sé-

-Estaremos unos treinta minutos, luego subiremos por el cabo, a los diez metros haremos una parada de tres minutos y luego seguiremos subiendo.

- Está bien.

Con la señal correspondiente desinflaron sus chalecos y comenzaron la inmersión.

Para ella siempre era como la primera vez, siempre tenía la misma sensación desde la primera inmersión, sentía que se introducía en un mundo exótico y deslumbrante, era como si viajara a otro planeta, un planeta completamente extraño y cautivante, tanto que deseaba quedarse ahí para siempre, perdida entre las aguas, con los cangrejos, peces, algas y un sin de otros seres, que al verlos en su mundo, siempre le robaban el aliento.

Una vez en el fondo, sintió como le tocaban el hombro, al girar el rostro se encontró con su compañero preguntándole si estaba bien a través de las señas. Eso era otra cosa que la asombró… ese idioma más antiguo que el habla era la única manera que podían comunicarse… ya que no existía otra forma…¡Y ella que pensaba que jamás le entenderían si hablaba con las manos! Y mucho menos esperaba entender ella, pero ahí estaba…gesticulando son sus manos para decirle a su compañero que estaba todo bien y poder comenzar su pequeño viaje.

Con movimientos pausados y sincronizados comenzaron a desplazarse por el fondo, a ella le encantaba ver los cambios de colores producidos por la luz…. Le gustaba ver a los peces nadar a su alrededor y a las algas moverse como si estuvieran expuestas al viento, pero lo que más llamó su atención fue la pelea de un par de cangrejos en una roca cercana. Con sus pinzas trataban de golpearse uno al otro…le recordaron al par de cangrejos que aparecían en “Buscando a Nemo”, tenían la misma actitud.

Siguió su camino, no se podía quedar atrás, si no se ganaría un gran regaño…Luego de unos minutos deambulando observando todo a su alrededor, sintió una fuerte ráfaga por fu espalda, lo que hizo detuviera su respiración unos segundos y se quedara más quieta que una estatua. Miró a su alrededor y observó a su compañero que a pesar de estar tranquilo, la miraba de manera fija y moviendo sus manos lentamente.

Demoró unos minutos en entenderle, le estaba diciendo que se girará lentamente y luego el comenzó a moverse mostrando como hacerlo.

Le costó otro par de segundos reaccionar y comenzar a girar, ya que sentía a su espalda como cortas pero intensas corrientes erráticas, pero a la vez más constantes. No supo de dónde sacó el valor para hacerlo, pero comenzó a girar. Pudo ver por el rabillo del ojo una masa oscura pasar rápidamente por su lado; no lo pudo evitar, pero su giro fue cualquier cosa menos lento.

Se encontró de frente, a menos de un metro una mole oscura, se movía de forma agraciada y veloz  dando giros en todas direcciones y mirando hacia todos lados de vez en cuando.

En una de esas miradas furtivas fue cuando la vio…ella al posar su mirada en esos ojos oscuros se le olvidó todo, se le olvido respirar, dónde estaba, y que era lo que tenía que hacer…. Su cuerpo dejó de obedecerle y sin siquiera darse cuenta estaba levantando el brazo hacia la figura y comenzaba a acercarse él.

Solo la sacó del pequeño transe otra fuerte ráfaga a uno de sus costados, giró la cabeza y se encontró con otra mole, parecía el doble de la otra….pero ésta en vez de mantener la distancia, la miraba con ojos curiosos y se acercaba a ella lentamente, como diciéndole que no se alejara.

Pensó en lo irónico de la situación. A ella que le habían recitado como un mandamiento por más de una semana que no podía tocarlos ni moverse de forma brusca, pero en su presencia mandó todo al carajo y lo primero que hizo fue tratar de tocarlos, en cambio, esta criatura, que se supone que no tenía ni idea de su visita, le estaba pidiendo con la mirada acercarse y lo hacía de manera pausada. “y se supone que soy yo la racional acá” pensó.

Esta vez se mantuvo quieta, ni siquiera se atrevió a bajar el brazo ya extendido, para no asustarlos.

Sintió que el tiempo se detenía en el momento que el lobo le tocó la mano con su hocico …sintió el grueso de sus bigotes y su suave piel. Luego de ese pequeño contacto, el se alejó volviendo a girar sobre su cabeza y mirarla desde arriba.

Vio el otro se acercaba y comenzaba a subir y a bajar girando de un lado a otro…luego de unos minutos se dio cuenta que los lobos estaban nadando en círculos a su alrededor, se acercaban con intenciones de tocarla, pero tan solo a unos centímetros se alejaban para volver a repetir la operación…

Nuevamente olvidó su mandamiento y comenzó a nadar…ella subía, ellos bajaban, ellos subían…ella bajaba…se transformó en una pequeña danza de tres participantes, dos completamente expertos le mostraban a la torpe primeriza de cómo se debían ejecutar los pasos de su baile.

Sintió una leve vibración en su muñeca, se dio cuenta que era hora de volver a la realidad; miró a su compañero con algo de temor, imaginaba el regaño posterior, pero se asombró a verlo en las mismas condiciones que ella con un lobo a solo unos aleteos de ella. El también la observó y le indicó era tiempo de partir. 

Una vez en el bote y de ser liberada de los pesados plomos y botella, solo atinó a abrazar a su amigo.

- Gracias, gracias, gracias- era lo único que podía decir.

- Me merezco un premio ¿no?- dijo el correspondiéndole el abrazo.

- No te pases….tu premio será no hacer el almuerzo esta semana…

El estalló en carcajadas…

-Eso es más castigo que nada… ¡no quiero morir por intoxicación!

Y así regresaron entre risas a su mundo….

Pero ella jamás olvidará la primera vez que danzó con lobos.





[1] Cuerda... si no quieren que un pescador, marino o cualquier persona relacionada con botes muera de un  infarto o los mate.... jamás le digas cuerda a la cuerda... se llama CABO!!!

martes, 30 de agosto de 2011

The Sims

Todo sería más fácil si fuera un sims...

- Me darían dinero por sacar los matorrales de mi jardín, no me cansaría y menos me ensuciaría.
- No tendría que fundir mi cerebro para aprender las cosas...solo con clic y estar unos segundos frente a lo que quiero para aprenderlo.
- Nunca verías gente con sobrepeso...u obesa...
- Tendría habilidades para pintar hermosos retratos y tocaría los instrumentos que siempre he querido... saldría una hermosa melodía y no el ruido sin sentido que suelo generar.
- Podría ver cuanto le agrado o desagrado a la gente con la barrita que llevarían sobre la cabeza.
- La gente sería más honesta...te diría cuando estás siendo desubicado o aburrido.
- Podría comprar habilidades de ninja con los puntos que me dan por aprender cosas.
- Tendría cosas que jamás en la vida voy a poder comprar....
- Antes de pasar a tener una relación sentimental me preguntarían " quieres ser más amiga de X persona" y así nos ahorraríamos muchos problemas.
- Construir tu casa a tu estilo, sin maestros de por medio.
- Tendría un montón de amigos...¡miles de mejores amigos! y probablemente un novio.

Pero también tiene sus contras.

- Que todos sepan lo que piensas por esa estorbosa nube que muestra tus pensamientos.
- Que te digan cuando comer, dormir, ir al baño o ir a ver a los otros.
- Verte todo pixeleado cuando te vas a duchar.
- Hacer cosas estúpidas para entrar a cedes sociales....
- Hablar un idioma que nadie entiende...ni los otros sims....
- Comprar ropa que no te gusta y tener que ponértela igual
- Hacer todo lo que te digan aunque no te guste.
- En el fondo no ser tu.

A pesar de haber mas pros que contras...no me gustaría ser un sims.... no me gustan las cosas fáciles...aunque suelo quejarme...no me gusta que me digan que hacer....no me gusta que sepan todo lo que pienso (hay cosas muy ridículas que no quiero que se enteren), a pesar de que muchas veces no me entienden....me gusta pensar que en este mundo hay un par de personas que incluso cuando hablo en idioma "gabiano"( es decir, "el idioma que solo gabi sabe"), me entienden y estarán ahí para mi.
y a pesar de que me gusta la música y el arte, disfruto más sin saberlo, arruinando los dibujos y destruyendo la música....así cuando intentan enseñarme a tocar un instrumento y no les resulta, solo se ríen y me dicen "ya pronto podrás" o cuando hago un dibujo y me miran con cara "no importa, a mi me gusta" pero en realidad es la cosa más fea que has visto en tu vida.
Me quedo con mi memoria de pollo, mi ignorancia, mis sueños de ser una super ninja o samurai... con mis traumas y mis pocos, pero buenos, muy buenos amigos.
Me gusta estar toda una tarde en el jardín, terminar toda sucia , cansada hasta más no poder y sin dinero por que no pagan por hacerlo.

por eso no quiero ser un sims... y ustedes?


viernes, 5 de agosto de 2011

Por ti

El viento acariciaba su rostro suavemente, tenía los ojos cerrados, trataba de concentrarse y evitar que el torrente de emociones que crecían en su pecho saliera a flote.

Estaba sentada al borde del abismo, sentía como una penetrante mirada seguía sus toscos movimientos, como ella se abrazaba su barriga y se movía de manera constante hacia adelante y atrás.

Trataba de pensar, sabía que ya no había vuelta atrás, pero verlo así de destrozado al percatarse de la decisión que había ella había tomado la estaba a punto de derrumbar, ya no sabía que era lo correcto.
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-   No…no puedes hacer esto sollozó.

-   Si puedo, de hecho lo estoy haciendo. Dijo ella con una sonrisa en su rostro. Se arrodilló junto al hombre y le dijo al oído en un susurro perceptible solo para el.- no dejaré que se los lleve, es nuestra última oportunidad, lo evitaré aunque no pueda volver.

-   ¡No! Volvió a gritar el hombre tratando de levantarse de manera infructuosa. Sus ojos se llenaron de lágrimas mientras veía como sujetaban a la mujer por la cintura y bajaban las murallas hacia el lado del acantilado.
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Sí, lo haría, por él y todos los que amaba.

Se dejó llevar por los recuerdos, la primera vez lo vio, cómo intentaba de manera infructuosa de enseñarle a tirar al arco o cuando lo hacían enojar y daba la idea que le saldría humo por las orejas.

No debió pasar mucho tiempo hasta que quedó perdida en el recuerdo, dónde solo estaba él, observándola con esa intensa mirada y esa sonrisa ladeada que a pesar de ponerla nerviosa, era lo único que lograba calmarla. No quería olvidarlo, se negaba a si misma el simple echo de que no era una opción, ella lo olvidaría quisiera o no.

Pensó por un segundo que era real, quiso tocarlo, pasar su mano por ese rostro, sentirse a salvo entre sus brazos nuevamente, como cuando era una niña y la abrazaba.

Una voz la saco de sus cavilaciones advirtiéndole que debían irse. Ya estaba decidido, no podía aplazarlo más.

Se levanto bruscamente y alzó el preciado tesoro a la altura de sus hombros, con los brazos completamente estirados  hacia el vació.

El hombre dio un grito ahogado al ver como la mujer soltaba las esferas hacia la nada.

No supo bien que fue lo que le dijo a aquel hombre, solo sentía el filo de la daga en su garganta, pero a ella ya nada la importaba, sabía que no podía volver, pero tampoco quería vivir lejos de ahí.

Pero un último recuerdo de esta vida la invadió, dónde le prometía que si algo así llegara a pasar, ella saltaría.

Si, ella saltaría, por el, por ellos.

- ¡Entonces hasta aquí llegas!, dijo el hombre enterrando suavemente la hoja en ella.

- No lo creo, dijo ella dando un paso hacia atrás y lanzándose al vacío.
  

lunes, 20 de junio de 2011

Naturaleza

Uno se olvida lo que realmente es. olvida que es parte de un sistema, no dueño de él, se cree que todo gira al rededor nuestro, pues, estamos muy equivocados.
Uno en el verano va a la playa, se baña en el mar y juega a "saltar" las olas, creen que todo está bien, que tenemos todo controlado, total, son olas de no más de tres metros. pero quisiera verlos ahora tratando de montar el mar, esas olas inmensas de más de 6 metros de altura, que revientan con tal fuerza que han roto plataformas de grueso cemento para bajar los botes, las que chocan con las fuertes rocas que parecen ni inmutarse ante el estruendo provocado,por la fuerza rompedora de la colisión, provoca que el agua llegue hasta el tercer piso de la facultad sin problemas, haciendo temblar los vidrios de manera amenazante y preocupante.
Jugamos con el viento, ¿quien en septiembre no ha encumbrado un volantín?, los coloridos cometas se mueven alegremente por la "brisa" ,llegan a grandes alturas dónde se logran ver apenas como un punto.
Olvidamos que la brisa puede convertirse en grandes ráfagas de viento de más de 110 km/hora capaces de arrancar árboles, techos, cortar cables dejándonos sin luz, quebrar matrices cortando el agua.
Cómo no recordar los temblores, de vez en cuando nos sacudimos un poco, pero no más. Pero cuando un simple temblor se torna en terremoto, se sacude tan fuerte que la tierra es capaz de cambiar su eje de rotación, cambia la geografía, destruye casas, edificios y nuevamente nos quedamos sin agua ni luz.....

No olviden que no somos los más fuertes ni los dueños de nada, que con sólo un plumazo podríamos desaparecer.

martes, 17 de mayo de 2011

Silencio

El silencio me ensordece, zumba en mis oídos... retumba en mi cabeza y no me deja pensar con claridad, gatílla el río de pensamientos de forma descontrolada.
El silencio provoca sonidos...el silencio deja escuchar a lo que nunca pones atención... como es al latir del corazón, sonido fuerte, rítmico y constante, pero fácilmente alterable, sólo con un pequeño estímulo, cambia su frecuencia y  ritmo. También se escucha el sonido del aire....el ingreso y la salida rápida de tu sistema
El crujir de la madera, de pronto la casa ya no es tan reconfortante.
y la luz ...la luz la odias....por ser tan brillante y por generar ese zumbido que te revienta el cerebro.

Es en esos momentos que odio el sonido del silencio.

lunes, 9 de mayo de 2011

Laberinto

Oscuridad, solo esa palabra se encontraba en su mente. A su alrededor solo se encontraba oscuridad.
Dio un paso hacia enfrente y como por arte de magia se encendieron miles de antorchas que se encontraban en las paredes. Se encontraba en un pasillo largo… tan largo que a pesar de estar alumbrado, no lograba ver el final. Tanto las paredes como el suelo estaban hechos de piedra perfectamente pulida sintiéndose extremadamente suave al contacto con los dedos. Miró hacia el cielo, no lo logró ver, pues las antorchas lograban alumbrar hasta los marcos de las miles de puertas que se encontraban en el corredor.
Caminó de manera insegura, esperando que de pronto cambiara su escenario, pero no fue así, logró llegar hasta una de las puertas, todas eran iguales: blancas y con una perilla ovalada del mismo color sin cerradura.
Trató de abrir varias, pero todas estaban cerradas, cuando estaba a punto de rendirse y sentarse a uno de los costados, la puerta que estaba forcejeando se abrió.
 Nunca imaginó que en su interior se encontraría con un bosque, tenía altos árboles frondosos , en el suelo se encontraban una gran variedad de arbustos y flores de todos los tamaños y colores, se lograba escuchar con claridad el sonido del canto de los pájaros y el rápido correr del agua del río que cruzaba por el bosque.
Frunció el seño… no le hacía mucha gracia adentrarse en ese bosque, no era que no le gustara, si no que pensó que si ya estaba perdida, al vagar por el bosque llegaría el momento en que oscurecería y con la ida del sol, aparecería  la humedad y el frío y que por lo menos el lugar donde se encontraba, que no tenía idea donde era, estaba agradablemente templado. Dejó abierta la puerta y cogió la antorcha que se encontraba a su costado, decidió que si no lograba abrir otra puerta, no le quedaría otra más que adentrarse en el bosque.
 Siguió caminando por el largo y angosto corredor, luego de unos minutos logró abrir otra de las puertas. Era una hermosa habitación, entraba escasamente la luz por las ventanas cubiertas con una densa capa de polvo. Quedó estática en el umbral de la puerta…sintió como su pulso se aceleraba ante la majestuosa alcoba y sin siquiera pensarlo entro en ella.
 A pesar de que se encontraba abandonada, se lograba vislumbrar su majestuosidad en sus tiempos de gloria. En el centro de la habitación se encontraba una gran cama de bronce con dosel, de su techo color lila caían las cortinas de tul  por los costados dejando ver el centro las mantas que llevaba los mismos tonos. Enfrente de la cama se hallaba un tocador color blanco con un espejo de tres cuerpos, en el se encontraba un peine de marfil y un hermoso cepillo ovalado con fuertes y gruesas cerdas y en el otro lado tenía un pequeño espejo, al otro costado del mesón, se encontraban unas trabas con distintas piedras de colores. Su respiración se cortó por unos segundos, en los que le pareció recordar esos broches en su largo y ondulado cabello.
No se dio cuenta en el momento en que los tomó y los acariciaba entre sus dedos con un dejo de nostalgia, al percatarse de eso, los soltó rápidamente como si de fuego se tratara, dando unos pasos hacia tras. Tropezó con una pequeña mesa, era redonda y le extrañó que fuera  de madera; sobre la su superficie había un gran candelabro de plata lleno de telas de araña y cubierto de polvo con velas a medio consumir. Quedó hipnotizada por aquel aparato, la luz que apenas lograba penetrar le daba un aire de misticismo, las motas de polvo revoloteaban por el aire, pero al acercarse al candelabro estas desviaban su trayectoria, rodeándolo, ninguna, absolutamente ninguna caía sobre el.
No lo resistió y lo tomó por la base. Ante el contacto con el frío y pesado metal, lo suelta de manera repentina estrellándose en el suelo generando un ruido ensordecedor, como si se estrellara el metal en una superficie indestructible, rompiéndolo en miles de fragmentos.

miércoles, 4 de mayo de 2011

martes, 8 de marzo de 2011

volver

Se acabo el verano, devuelta al ultimo año universitario que me espera.
debo sacar fuerzas y volver a levantarme temprano, enceder mi cerebro. Debo rendir....debo continuar, total, ya falta poco.

Pero la verdad es una sola...estoy cansada de mi misma y aterrada...aterrada por que es el ultimo año..me gusta, encanta lo que estudio..pero no se si seré capaz de enfrentarme a lo que viene... el temido para mi "seminario de investigación" y la terrorífica "tesis" el próximo semestre....
La cosa es que volveré a ocupar la mente en cosas que no sea mi egocentrismo y autocampación (que este año estuvo realmente fuerte) como son mis amados peces, invertebrados y otras cosas.

Bueno, espero que todo salga bien, por mientras comenzaré mis ejercicios de respiración para ver si puedo pensar mejor.

jueves, 10 de febrero de 2011

Estupidez

Se que he estado totalmente apartada de todo y de todos.
Se que no hay excusa a mis actos antisociales y autosuprimentes (no se si existe esa palabra)
Pero es algo que va mas allá de mi voluntad (o in-voluntad) mi mente es una gran enredo como los que se generan con la zarzamora, eso que no sabes donde inician, que tratas de encontrar el origen de ese gran enredo y aparte de no encontrarlo, sales realmente lastimado por sus espinas que se encuentran en todos lados.
mi mente esta cansada lo que lleva a fatigar a mi cuerpo con dolores sin origen biológico pero muy presentes y molestos. (es posible que los sentimientos duelan?)
no se donde estoy parada, ya no tengo energías para enfrentar esto que me ha perseguido toda la vida. Se que esto siempre me ocurre, pero esta vez siento que de verdad ya no puedo, por más que trate ya no funciona.
Se que tengo abandonados a mis seres queridos, a mis grandes amigos, les estoy fallando, los abandoné, incluso hasta mis amigos imaginarios me reclaman (y los reales ya están aburridos y dejaron de reclamar), pero de verdad siento que si los veo solo molestaría (tienen cosas más importantes de que preocuparse), regañarían mi actos (con justa razón) y estoy segura que merezco más de una bofetada por mi falta de amistad, por que como dice un escritor francés (no me acuerdo como se llama, karr creo) "Los amigos: una familia cuyos individuos se eligen a voluntad." yo he abandonado a mi familia, quiero recuperarlos, pero no se como, ya olvidé como hacerlo y sinceramente me siento sin energías ni para pensar. 
Hoy por fin me levante a ver a una amiga que operaban al corazón abierto (creo que así se dice cuando le abren el pecho), fue extraño, primero por salir de la casa, segundo por que estaba lloviendo a cantaros en pleno febrero, cuando se supone que estamos en medio del verano, cuando hay un sol radiante y altas temperaturas y tercero por que estoy muy sensible y quería puro largarme a llorar, osea aquí todos saben que yo nos soy de las que ando llorando por la vida, jamás lloro, por lo menos enfrente de la gente (creo que solo dos o tres personas me han visto llorar que no sea mi mamá), pero ahí estaba yo, al borde del llanto en medio de una sala de hospital, por suerte todo salio bien y logre contenerme y no ponerme a llorar como una tonta.

Solo digo que de verdad los extraño, quizás me de el ataque de egoísmo y los llame aunque sea para escuchar sus regaños.

Ya creo que dejare esto hasta aquí, uno por que no creo que todos lleguen a leer esto hasta el final y dos por que estoy dando vueltas en una misma idea autocomplaciente, si ya olvidé incluso como hilar mis ideas. esto realmente es una estupidez